En mi último artículo, abordé el tema del papel de la indometacina en el tratamiento del conducto arterioso persistente en bebés prematuros. La indometacina es un medicamento antiinflamatorio que ha demostrado ser eficaz en el cierre del conducto arterioso, una estructura vascular que, si no se cierra después del nacimiento, puede causar complicaciones graves en los recién nacidos prematuros. Este tratamiento es especialmente importante en bebés con un peso muy bajo al nacer, ya que el riesgo de complicaciones es mayor en estos casos. Sin embargo, es fundamental tener en cuenta los posibles efectos secundarios y contraindicaciones de este fármaco, como problemas renales o hemorragias. Por lo tanto, es imprescindible que los médicos evalúen cuidadosamente cada caso para asegurar un tratamiento seguro y eficiente en estos pequeños pacientes.
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